Según un estudio, realizado en febrero de este año por la empresa Synchrony, las personas nacidas a fines de la decada 90′ y principios del año 2000 prefieren ver más felices a sus mascotas que a sus parejas.
La investigación se realizó en Estados Unidos y hubo alrededor de 2000 encuestados.
“Pertenecemos a una generación que la gran mayoría de nosotros hemos tenido una mascota que hemos querido como a un miembro más de la familia” afirmó uno de los jóvenes encuestados.
El 41% de la generación Z es más probable que gaste 100 dólares en su mascota que en su pareja, en un boleto o unas vacaciones. Además, el 53% de los encuestados consideran que su mascota es parte de su familia.