Especialistas en sueño infantil destacan sobre la importancia de un descanso adecuado para el crecimiento y desarrollo saludable de nuestros niños. Un descanso adecuado no solo contribuye a su bienestar físico, sino también a su desarrollo cognitivo y emocional.
Los niños necesitan más horas de sueño que los adultos. Por ejemplo, un niño de 3 a 5 años necesita entre 10 y 13 horas de sueño por noche.
La importancia de la primera infancia
Los primeros años de vida son cruciales para el desarrollo del cerebro. Un sueño adecuado durante esta etapa es esencial para la formación de conexiones neuronales y el desarrollo cognitivo. Según el Instituto del Sueño, se estima que entre el 25 y 30% de las visitas al pediatra están relacionadas con algún problema ligado al sueño. Los niños suelen despertarse con frecuencia de noche.
Un factor clave para asegurar un sueño reparador en los bebés es la elección del colchón adecuado. Por esta razón, Calm ha trabajado en la firmeza de su colchón exclusivo para bebés para que brinden el soporte necesario para la columna vertebral y reduzcan el riesgo de asfixia.
Según Piedra Buena, consultora especializada en sueño infantil de 0 a 5 años y colaboradora del podcast de Calm es Simple, “acostar al bebé boca arriba sobre una superficie firme, es fundamental para su seguridad y bienestar”.

¿Por qué es tan importante el sueño en la infancia?
● Crecimiento: Durante el sueño, el cuerpo libera hormonas de crecimiento que son esenciales para el desarrollo físico.
● Aprendizaje y memoria: El sueño consolida lo aprendido durante el día, mejorando la capacidad de concentración y el rendimiento escolar.
● Sistema inmunológico: Un sueño adecuado fortalece el sistema inmunológico, protegiendo a los niños de enfermedades.
● Salud mental: El sueño regula las emociones y ayuda a prevenir problemas como la ansiedad y la depresión.
Por su parte, Elianne Silberman, psicóloga infantil, enfatiza que “el ambiente de sueño es todo: debe ser un lugar seguro, oscuro y tranquilo”. La especialista recomienda utilizar un velador con luz roja o naranja para facilitar la transición al sueño y evitar que la cama se asocie con otras actividades, como desayunar o jugar. Establecer una rutina antes de dormir, crear un ambiente tranquilo y apto en la habitación, limitar el tiempo de pantalla y evitar las bebidas estimulantes son algunas de las claves para un buen descanso.
Un sueño reparador es uno de los mejores regalos que podemos ofrecer a nuestros niños. Proporcionarles un entorno de sueño seguro y confortable, con un colchón adecuado y siguiendo rutinas saludables, estaremos contribuyendo a su crecimiento y desarrollo integral. Invertir en el sueño de nuestros hijos es invertir en su futuro.