“Me cuesta mucho encontrar pareja y a quienes encuentro no son las personas
indicadas”, “no logro conectar con los novios o novias que he tenido en la vida”,
“encuentro personas que ya están casadas o con pareja”, son algunas de las
problemáticas que múltiples personas sufren a diario en el ámbito sentimental.
Todo esto ¿tiene solución? Algunos experimentan diferentes sensaciones negativas
al enfrentarse con esta situación, es más cotidiano de lo que se puede pensar.
Incluso les sucede a aquellos que jamás entablaron una relación formal y que
anhelan poder lograrlo. Pueden existir diversos motivos por los que se genera este
malestar o inseguridad, incluso algunos que ni nos imaginamos, desconocemos o
mismo creemos que ya nuestra personalidad es así, sin explicación alguna.
Para estas cuestiones, la Terapia de Regresión suele ser una opción eficiente para
lograr ser conscientes de lo que hacemos inconscientemente, con el fin de trabajar
terapéuticamente las experiencias traumáticas ocultas de esta vida y de existencias
anteriores que desde otro plano del subconsciente pueden perturbar la vida actual.
Dicha terapia tiene como uno de sus objetivos, detectar aquello que se repite y que
no sabemos de dónde viene, entenderlo y resolverlo progresivamente. Se hace a
través de una relajación, y el paciente no necesita saber meditar ni ser conocedor
de algún tipo de técnica previa para realizar la regresión.
“Están todos preparados para esto, y claro que quien se preste más a dejar fluir todo
esto, permitirá que la sesión se desarrolle más fácil. Puntualmente en el caso del
miedo, inseguridad o cansancio por no poder formar pareja, el paciente llega con el
conflicto de dicha situación, y tal como dijimos, con esta terapia lo que hacemos es
llegar a la parte inconsciente, a lo que no sabemos de dónde viene”, expresó
Gustavo N. Romoli, terapeuta en Regresión a vidas pasadas y miembro de la
International Hypnosis Association @regresionesavidaspasadas).
La persona pudo haber adquirido el problema, tal vez, en el vientre materno, con
una situación tal como que la mamá y el papá hayan discutido durante todo el
embarazo, entonces el primer aprendizaje que tiene ese individuo es esto de ‘mejor
no atraer parejas porque son para conflictos. De esta manera, estoy continuamente
alejándome de las relaciones o atrayendo inconscientemente parejas que no me
convengan. También puede ser que el problema venga de una vida pasada donde
tal vez existió alguna promesa a una pareja antes de ir a la guerra por ejemplo, y la
persona quedó atada a eso porque el amado o amada murió en la guerra, no volvió
y quedó atado a esa promesa. O haberse quedado esperando a alguien y el amor
nunca volvió, entonces uno queda en esa espera continua”, agregó el profesional.
Romoli desarrolló otro ejemplo dentro de su consultorio: “trata de un paciente cuyo
padre en una vida pasada le dijo ‘te voy a pedir por favor que te hagas cargo de tus
hermanos y de todo el rancho que tenemos’. Se muere cuidando todo y en esta
vida, este paciente no se permitía formar pareja porque en una vida pasada le
prometió al padre quedarse a cargo de eso, y en esta vida se hace cargo de la
madre, del padre, de los hermanos más chicos”.
Una vez detectado el origen, dependiendo de dónde sea y de cómo sea, se hace un
trabajo de resignificación. Esto quiere decir que lo que buscan los profesionales es
un nuevo significado del problema, dependiendo de dónde viene. Llevamos al
consciente una situación, cómo te afecta en tu vida actual, qué cosas te hace hacer
en la actualidad y cuáles otras te impide. Con la terapia se puede llegar a romper la
promesa en caso de que exista. La persona se libera y también libera a la otra
persona involucrada si la hay.
La Terapia de Regresión busca llegar a lo consciente de cómo le afectan al paciente
las cosas que le impiden hacer y que logre darse cuenta que esa carga energética.
Por otro lado, si esto sucedió en una vida pasada o en la infancia, se hace un
resignificamiento y ¿qué es? se trata de hacer todo lo que no pudo hacer, esto
queda justamente en una carga energética, atrapado en este espacio porque no
hicimos lo que nos hubiera gustado hacer en ese momento.
Desde la terapia se busca devolverle la carga energética a quien corresponda y si
es a una vida pasada, como mencionamos, se hace lo que no se pudo hacer. Las
malas experiencias amorosas actuales, activan los recuerdos de las vidas pasadas.
Esto genera que automáticamente uno mismo se auto boicotee o genere juntarse
con personas, por ejemplo, casadas con las que no tengo futuro. Todo pasa por
algo, nada es casualidad. Una vez que se trabajó sobre el problema, no hay que
hacer nada más que dejar que la energía se vuelva a acomodar. Cada paciente
tiene sus tiempos, algunos más rápido y otros más lento. Sé trata de un proceso de
evolución, el alma se toma sus tiempos y las personas regresan a este tipo de
terapias cuando realmente lo sienten.
“Para acceder a todo lo mencionado, no es necesario creer, esto no va de la mano
de ninguna religión ni nada, no es necesario creer porque también lo vemos -al igual
que los pacientes- en los resultados. Lo que buscamos como profesionales en la
materia, es aplicar la técnica a quien busca encontrar respuestas sobre cosas que
no está pudiendo trabajar o sanar en su vida”, señaló Romoli. La persona está
buscando esto porque no entiende qué le pasa. Y ¿cómo me doy cuenta si estoy
con la pareja correcta? A través de algunos interrogantes tales como: ¿Siento que
me faltan cosas cuando estoy con esta persona? ¿Soy feliz o siento que estoy
acostumbrado a algo? ¿Me llena esta persona, me completa? Y más. Son muchas
las preguntas para plantearse ante esta problemática que tanta duda generan en
nuestra sociedad actual y en la de nuestras vidas pasadas.
