La autoestima que tengas afectará e influirá en la manera de relacionarte con una pareja. Cuando la autovaloración que tengo de mí mismo es baja, puedo tomar actitudes pasivas o agresivas en la relación. Si no me valoro, probablemente tienda a elegir de forma inconsciente vínculos que me hagan daño a nivel emocional, a nivel físico o ambos.
Cuando no me siento seguro de mí mismo, no me respeto, soy capaz de hacer cualquier cosa por obtener la aprobación de los demás y puedo llegar a sentir que merezco todo tipo de humillación. Tener la autoestima baja hace que crea que no soy merecedor de afecto, cariño y buen trato.
«Jazmín, ¿por qué siempre termino con hombres que no me respetan, me mienten, son infieles y violentos?», me preguntó una paciente en una ocasión. Justamente, era una mujer que estaba sanando, mediante la terapia, heridas del pasado que le habían dañado mucho la autoestima. De pequeña, sufrió el abandono de sus padres y, por supuesto, de adulta se percibía como una mujer insegura, con un terrible miedo a la soledad y al abandono. Por lo general, se conformaba con hombres que taponaban esa soledad a cambio de un costo emocional altísimo. Cuando logramos trabajar sobre sus heridas emocionales, es decir, sobre su historia familiar, sobre todo la relación con sus padres, ella entendió por qué elegía inconscientemente a este tipo de parejas. Comenzó a afianzar su autoestima y a valorarse más, y al poco tiempo pudo salirse de esa relación que tanto daño le hacía.
Si atraigo parejas tóxicas, es porque debo sanar mis heridas del pasado y esa baja autoestima que quedó en mí. En las relaciones de este tipo, no me valoro y toda la energía está puesta en el otro, llego a obsesionarme con que mi pareja cambie y soy capaz de hacer cualquier cosa con tal de darle todo lo que necesita. La falta de amor hacia mí mismo es tan grande que solo me siento vivo en esa relación y no me importa nada ni nadie más. Me sube la adrenalina y genero una adicción que no me deja cortar con el vínculo. Las parejas donde no hay control, celos y discusiones me terminan pareciendo aburridas.
Llego a una relación tóxica con baja autoestima y, sin darme cuenta, me voy intoxicando cada vez más, hasta perder el norte, pues son vínculos que me van debilitando con el paso del tiempo y no permiten que me desarrolle. No soy capaz de ver el infierno que estoy viviendo y continúo adelante hasta perder totalmente la dignidad.
Las relaciones tóxicas afectan la autoestima y la salud de sus miembros y provocan sentimientos de infelicidad e insatisfacción.
La buena noticia es que se puede salir con la ayuda de un profesional adecuado y una red afectiva de contención. Y también con mucha paciencia, y confianza en tu propio proceso.
