jueves, abril 25, 2024

¿Meditamos?

“La felicidad de una mente que mediante profunda meditación ha sido lavada y limpia de toda impureza y ha entrado dentro del Ser, no puede ser descrita con palabras, sólo puede ser sentida por el poder interno.” Upanishads: Maitrayana-Brahmana 6

Hola, ¿cómo estás?

Creo que ya pasó tiempo suficiente para que hayas notado tus cambios desde que comenzamos a trabajar con las afirmaciones para tu sanación.

Este ciclo que la naturaleza nos brinda y que conocemos como invierno nos invita a ir hacia adentro para conectar con todo nuestro ser, así como los animales se dirigen a sus cuevas a hibernar. Y qué mejor manera de hacerlo que meditando.

Las preguntas más frecuentes que suelo escuchar de algunas almas que se acercan a mí o me escriben son “¿qué es meditar?”, “¿qué hago para saber si estoy meditando?”. También me dicen “Yo no sé si puedo meditar”.

Si buscás, vas a encontrar muchísimas definiciones sobre qué es meditar. Simplemente es un acto ligado a lo espiritual, una pausa donde tu mente, tu corazón y tu cuerpo poco a poco se conectan para que logres un estado de presencia en el momento presente. Todos podemos hacerlo ya que no se necesita ninguna facultad “especial” ni ningún “superpoder”.

El objetivo de la meditación es el autoconocimiento y la autotransformación. Con la práctica entrenamos a nuestra mente a no distraerse tan fácilmente y así lograr llevar la atención plena al momento presente sin juzgar durante el proceso los posibles contenidos o pensamientos que puedan llegar a querer intervenir. Recordá que trabajar sobre nuestra mente es la única manera de empezar a ser felices, ya que uno de los objetivos de la meditación es evitar nuestro sufrimiento y siempre la raíz de todo sufrimiento está en nuestra mente.

Hay tres principios esenciales que te ayudarán a comenzar. Ellos son: tu postura, tu mente y tu respiración. Abordamos la postura con el cuerpo físico, la mente con nuestros pensamientos y la consciencia en el momento presente y la respiración que permitirá que tu mente vuelva al aquí y ahora.

La meditación no es competitiva, no lesiona, no genera goce estético. Por el contrario, desarrolla nuestra voluntad, es una fuente inagotable de energía. Una vez un maestro me dijo: “Cuando rezamos, hablamos con Dios; cuando meditamos, escuchamos lo que Él tiene para decirnos”. Los beneficios son innumerables tanto a nivel mental, como emocional y físico. Por ejemplo: mejora el descanso, reduce niveles de estrés y ansiedad, enriquece tu autoestima, mejora tu respuesta inmunitaria, y muchos más.

Para comenzar, te propongo que busques un rinconcito en tu casa, enciendas una velita o un sahumerio, prepares un almohadoncito o zafu, o simplemente sentate en una silla. Podés cerrar tus ojos para no recibir estímulos del afuera o dejarlos abiertos y mirar la llama de la vela o un mandala. Conectate con tu respiración. Podés mantrear una afirmación sobre la que deseás trabajar, cantar un mantra o escuchar sonidos de la naturaleza. Esas son algunas posibles y sencillas maneras de comenzar con tu práctica diaria.

No importa si nunca lo hiciste antes. Lo único que necesitás son tus ganas y tu predisposición para autoobservarte y reencontrarte con vos mismx.

“De cualquier forma que un ser humano adquiere grandeza en este mundo, obtiene su paz según sea su meditación.” Upanishads: Chandogya 7.6

¡Hasta la próxima!

Vanina Jimena Perez

Instagram: tryambakambanfield

Vanina Jimena Perez
Vanina Jimena Perez
?Hatha Yoga Adultos y Niños??Embarazadas ??‍♀️Meditación ??Maestra Reiki Usui y Karuna ?Reg. Akashicos ⚖️Terapeuta Ayurveda ?Radiestesia.y P. Hebreo
ARTÍCULOS RELACIONADOS

MÁS LEÍDAS